CERROS DE TURRUBARES (Ecosistemas de Costa Rica). Todo lo que necesita saber sobre ecosistemas, biodiversidad, zonas protegidas y especies de Costa Rica.
La Zona Protectora Cerros de Turrubares fue creada por la Ley nº 6.900 Art. 3, inc. 5 del 01-12-1983, con una extensión de 2.867 hectáreas y con el propósito de proteger su suelo de la erosión debido al mal uso de la tierra. Se localiza al suroeste de San Pablo, en el cantón de Turrubares, en la provincia de San José. Inicialmente más de 70% estaba cubierta por pastizales y cultivos agrícolas. Sin embargo, actualmente esta situación se ha revertido y más del 80% de la misma está cubierta de bosques secundarios. Hace linde con el Refugio de Vida Silvestre Dr. Fernando Castro Cervantes. Su clima es húmedo en las partes bajas, muy caliente, con una estación seca larga; mientras que en las partes más altas el clima es muy húmedo, templado con una estación seca corta. La precipitación supera los 3.000 mm anuales.
La mayor parte de estos cerros están cubiertos de bosques primarios intervenidos y de bosques secundarios, importantes para la protección de las cuencas hidrográficas. En las partes bajas la zona de vida es bosque muy húmedo tropical, transición a premontano;
mientras que en las partes altas se presenta el bosque pluvial premontano y bosque pluvial
montano bajo.
El Cerro Turrubares está compuesto por rocas volcánicas que se originaron en el fondo del océano, alcanza los 1.756 msnm y
conserva en su cima afloramientos de lavas poco alteradas.
El río Tusubritos, importante afluente del río Tusubres, nace en el piemonte oeste del
Turrubares y cava su propio curso medio en una importante alineación de falla noroeste-sureste, que se prolonga en el pacífico hasta Puntarenas.
En esta área nacen varias quebradas permanentes y estacionales que son afluentes de los ríos
Turrubares y Carara. Dentro de la zona protectora se ubica la toma de agua potable a la ciudad
de Orotina.
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| Hyperbaena eladioana |
En la zona protectora encontramos flora como el roble (Quercus sp), el cascarillo (Lafoensia punicifolia), el quizarrá
(Nectandra sp), el níspero (Manilkara zapota), el cedro (Cedrela odorata), el higuerón (Ficus sp), el chilamate (Ficus sp), el turrú (Parinari exelsa), el gallinazo (Schyzolobium parahyba), el guarumo
(Cecropia peltata), el burío (Heliocarpus sp), el aguacate (Persea americana), el jobo (Spondias
mombin), el surá (Terminalia oblonga), el ojoche (Brosimum alicastrum) y el peine de mico, entre otros muchos.
La fauna que circunda la zona está representada por el mono carablanca (Cebus capucinus), el cabro de monte
(Mazama americana), el venado cola blanca (Odocoileus virginianus), el sahino (Tayassu tajacu), el pizote (Nasua narica), el mapache (Procyon lotor), la guatuza (Dasyprocta punctata), el tepezcuintle
(Agouti paca), el manigordo (Leopardus pardalis), el caucel (Leopardus wiedii), el león breñero
(Herpailurus yaguaroundi), el oso colmenero (Tamandua mexicana), el zorro pelón (Didelphis
marsupialis), el armadillo (Dasypus novemcintus), el armadillo y el zopilote (Cabassous centralis). Entre las aves destacan la lapa roja (Ara macao), el tucán pico iris (Rhamphastos
sulfuratus), el tucán bicolor (Rhamphastos swainsonii), el tucancillo verde (Aulacorhynchus
prasinus), el pavón (Crax rubra), la pava granadera (Penelope purpurascens), el sargento
(Ramphocellus passerini) y el cuclillo listado (Tapera naevia). La iguana
(Iguana iguana) y la serpiente terciopelo (Bothrops asper) están también representadas. Una de las características importantes de la zona es que existen una serie de endemismos de flora como la Hyperbaena eladioana.
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| TAPERA NAEVIA (Cuclilllo listado) |
La conservación de los bosques del área es de vital importancia para los pobladores de la región, constituyendo el abastecimiento principal de agua para la región de Orotina y otras poblaciones vecinas.
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