Las unidades fitogeográficas equivalen a la división de un territorio por zonas atendiendo a las formaciones vegetales que lo ocupan. Aunque son muy importantes para la clasificación de los ecosistemas no son lo mismo. Estas unidades comparten solo las características en sus patrones de vegetación.
En Costa Rica se han identificado 33 unidades fitogeográficas terrestres, algunas son mucho más extensas que otras.
1 - LLANURAS DE GUATUSOS, TIERRAS BAJAS
Tierras bajas con topografía plana, 10-40 m, inundadas la mayor parte del año; esa condición de anegamiento tiene un efecto directo sobre la composición y estructura de la vegetación y provoca la formación de asociaciones de pocas especies que cubren extensiones significativas; la diversidad general de plantas es reducida.
2- LLANURAS DE GUATUSO, TIERRAS ELEVADAS
Tierras elevadas con topografía plano-ondulada o levemente irregular, entre 40-500 m, con una buena condición de drenaje de los suelos y ausencia de anegamiento permanente, lo cual disminuye la formación de asociaciones de especies a gran escala y permite el sustento de una vegetación más heterogénea o diversa.
3- LLANURAS DE SAN CARLOS, TIERRAS BAJAS
Tierras bajas con topografía plana o ligeramente ondulada, 30-100 m, inundadas o semi-inundadas la mayor parte del año, con presencia de vegetación heterogénea en suelos de mejor drenaje y dispersas formaciones de asociaciones de especies en áreas influenciadas por el anegamiento.
4- LLANURAS DE SAN CARLOS, TIERRAS ELEVADAS
Tierras elevadas entre 100 y 500 m, con topografía mayormente ondulada a irregular, suelos en general con buen drenaje, con vegetación heterogénea y alta diversidad de plantas. Sotobosque con abundancia de palmas, mayor concentración en las elevaciones bajas de esta unidad. Esta subunidad cuenta con
la más alta diversidad de plantas, con presencia de unos pocos elementos florísticos de bosques montanos, que refleja cambios e indica inicios de una unidad superior.
5- LLANURAS DE TORTUGUERO, TIERRAS BAJAS
Tierras bajas con topografía plana, entre 0-100 m, inundadas la mayor parte del año, lo que provoca la formación de extensas masas de bosque dominadas por unas pocas especies, en especial en aquellas áreas con inundación permanente. En general, esta condición de humedad de los suelos diminuye relativamente la diversidad de plantas y eleva la abundancia de unas pocas.
6- LLANURAS DE TORTUGUERO, TIERRAS ELEVADAS
Tierras elevadas, entre 100 y 700 m, con topografía mayormente ondulada a irregular que provee un buen drenaje a los suelos y eleva la diversidad de plantas y la formación de una vegetación más heterogénea. Esta subunidad tiene una alta diversidad de plantas, con presencia de unos pocos elementos florísticos de bosques montanos, lo que refleja cambios e indica inicios de una unidad superior.
7- TIERRAS BAJAS DEL CARIBE SUR
Tierras bajas con topografía plana, de 0-100 m, con apariencia de llanura, permanecen inundadas la mayor parte del año, con presencia de asociaciones vegetales dominadas por unas pocas especies lo cual provoca una disminución general en la diversidad de plantas. Algunas áreas con un mejor drenaje albergan una vegetación más diversa y una estructura de bosque distinta.
8- ESTRIBACIONES DEL CARIBE DE LA CORDILLERA DE TALAMANCA
Tierras elevadas, entre 100 y 700 m, con topografía de ondulada a irregular que provee un buen drenaje a los suelos y eleva la diversidad de plantas o la formación de una vegetación más heterogénea. Esta subunidad cuenta con alta diversidad de plantas, con presencia de unos pocos elementos florísticos de bosques montanos, lo que refleja cambios e indica inicios de una unidad superior.
9- PENÍNSULA DE SANTA ELENA
Tierras con topografía irregular o quebrada, 0-719 m, con algunas áreas de llanuras de formación aluvional entremezcladas, principalmente en la desembocadura de ríos de mayor caudal. Alberga una vegetación propia de climas secos, en general caducifolia con elementos que se distribuyen en áreas áridas y subáridas, arbustiva, con sabanas arboladas y bosques de galería en las cuencas. Una pequeña muestra aislada de vegetación siempre verde con características de bosques nublados montanos aparece en la cima de mayor elevación (719 metros). Geológicamente, es uno de los sitios más antiguos de Centroamérica.
10- TIERRAS BAJAS DEL TEMPISQUE
Tierras bajas con topografía plana, 0-40 m, inundadas la mayor parte del año; esta condición de anegamiento por largos periodos y niveles de agua relativamente altos albergan una diversidad de plantas exclusiva de sitios lacustres o palustres; la condición topográfica y edáfica de esta subunidad restringe o provoca un aislamiento de la vegetación.
11- PIE DE MONTE DE LA CUENCA DEL TEMPISQUE
Tierras bajas con topografía plana a ondulada, de 40-600 m, incluye el pie de monte de las cordilleras
de Guanacaste y Tilarán y lomas bajas del noroeste de la península de Nicoya, y se extiende al sur hasta el Valle Central occidental. Alberga una vegetación mayormente caducifolia, con pequeñas manchas de vegetación siempre verde o bosques de galería, en especial en áreas donde la capa de agua es más elevada; así como sabanas arboladas en la parte noroeste limitadas por una formación edáfica especial. Su composición cuenta con un patrón de dominancia (mayor-menor) y distribución norte-sur a lo largo del litoral hasta el Pacífico central.
12 CERROS CÁRSTICOS DE LA CUENCA DEL TEMPISQUE
Cerros cársticos con topografía ondulada o
irregular; formaciones calcáreas inmersas en una matriz general de llanuras
a su alrededor provocan un aislamiento de la vegetación que se asienta sobre
este sustrato tan exclusivo en la región, varias especies de plantas están
restringidas a esta condición edáfica.
13- LADERAS DE LOS EDIFICIOS VOLCÁNICOS DE GUANACASTE
Tierras de laderas con topografía desde ondulada
hasta quebrada, entre 600 y 1500 m por el Pacífico
y 500-1500 m por el Caribe. Esta banda de elevación alberga una vegetación
con características más húmedas por el lado Caribe y con un ligero efecto de
estacionalidad por el lado pacífico. Su fisonomía en general es de
vegetación compacta, con un sotobosque denso con muchos tallos. Modelada
principalmente por factores climáticos como la neblina y fuertes vientos.
14- CIMAS DE LOS EDIFICIOS VOLCÁNICOS DE GUANACASTE
Tierras de las cimas de los edificios volcánicos,
arriba de los 1500 m, con topografía quebrada, vegetación bajo condiciones
de humedad relativa alta constante o permanente la mayor parte del tiempo, lo
que hace que su diversidad sea más o menos homogénea. Los pasos abruptos que
separan estos edificios volcánicos también tiene un efecto en la
particularidad de la flora que albergan dichas cimas. Su fisonomía, en
general, es de vegetación compacta, con un sotobosque denso con muchos tallos.
Modelada principalmente por factores climáticos como la neblina y fuertes
vientos.
15- CORDILLERA DE TILARÁN
Tierras de laderas con topografía ondulada a
quebrada, a partir de los 800 m (por el Pacífico) y 500 m (por el Caribe). Por
su condición de cordillera relativamente baja, de topografía general
relativamente uniforme en toda su extensión, carece de pasos abruptos que le
den una cierta “fragmentación”, lo cual incide en una vegetación, en la banda
indicada, más o menos homogénea, con una fisonomía determinada por la
nubosidad y fuertes vientos. En general esta cordillera es más húmeda y con
menos estacionalidad que la cordillera de Guanacaste.
16- CORDILLERA VOLCÁNICA CENTRAL
Tierras de laderas con topografía ondulada a
quebrada, a partir de los 1200 m (por el Pacífico) y 700 m (por el Caribe),
hasta los 2900 m. En general es una cordillera más húmeda y menos afectada
por fuertes vientos contrario a cordilleras anteriores con un ámbito
altitudinal mayor. Su origen es volcánico reciente. Su vegetación, en
especial hacia las partes más altas, presenta una mayor cantidad de elementos
florísticos montanos de origen suramericano o bien de mayor relación
florística con la cordillera de Talamanca.
17- VALLE CENTRAL OCCIDENTAL Y CERROS DE TURRUBARES
Tierras de baja elevación, con una combinación de
topografía plana, ondulada a quebrada, su elevación está entre 700-1200
metros. Alberga una vegetación que resulta en una mezcla de elementos de
distribución pacífico-costera, caducifolios a semi-caducifolios con
elementos propios de elevaciones medias de la vertiente pacífica, en especial
de distribución norte-sur y con un clima transicional provocado en mayor grado
por efecto orográfico de la cordillera Central y estribaciones de la
cordillera de Talamanca.
18- LADERAS DEL LITORAL CARIBE DE TALAMANCA
Laderas del litoral Caribe, con elevación entre 700 y
3000 metros, de topografía quebrada a muy que- brada en casi toda su
extensión. Esta región cuenta con una serie de pequeñas cordilleras o
serranías de mediana elevación que corren más o menos en forma transversal o
con dirección noreste y con dis- minución de elevación progresiva hacia la costa
Caribe. Aunque el gradiente altitudinal es muy amplio, se asume (por ausencia
de suficiente información) que debido a esa variada topografía, se da un
cambio gradual en la composición de la vegetación, lo cual hace difícil
identificar límites discretos para subdividir el área en más subunidades. En
general esta vertiente es más húmeda, dada su exposición directa a los
vientos alisios del norte.
19- LADERAS DEL LITORAL PACÍFICO DE TALAMANCA
Tierras de laderas del litoral Pacífico, con altitudes
entre 1000 y 3000 metros, de topografía a quebrada. Esta unidad conforma una
banda a lo largo de la cordillera que alberga una vegetación expuesta a una
estacionalidad climática provocada por el efecto orográfico de la misma
cordillera; además, el sistema montañoso que va paralelo a la costa (Fila
Chonta, Dominical, Fila Cruces) y opuesto a esta subunidad captura la mayor
parte de la humedad que proviene del Pacífico, favoreciendo aún más esta
condición de estacionalidad y por ello varios elementos de las partes bajas
alcanzan esta subunidad. Esta condición climática genera entonces una flora
distinta, tanto en estructura como en composición de los bosques.
20- PÁRAMOS DE LA CORDILLERA VOLCÁNICA CENTRAL
Tierras elevadas con topografía quebrada, entre los
2900-3432 metros de elevación, sometidas a bajas temperaturas o variaciones
abruptas entre el día y la noche. Este factor, asociado con la elevación,
con- diciona el desarrollo y existencia de una flora con características parameras,
no solo en su apariencia, sino en su composición. Además, su sustrato de
origen volcánico, le da un carácter único en compa- ración con su similar
en la cordillera de Talamanca. La depresión del valle del Guarco y valle del
río Reventazón separa la cordillera Volcánica Central de la cordillera de
Talamanca.
21- PÁRAMOS DE TALAMANCA
Tierras elevadas de topografía ondulada, entre los
3300-3819 metros de altitud, sometidas a bajas temperaturas o variaciones
abruptas entre el día y la noche. Este factor, asociado con la elevación,
condiciona el desarrollo y existencia de una flora achaparrada y arbustiva,
de características y especies únicas. Por lo general, arriba de los 3500 m,
la flora es constituida únicamente por musgos y líquenes; hay presencia de
glaciación en algunos casos y no tiene sustrato volcánico.
22- LADERAS Y ZONAS BAJAS DE LA PENÍNSULA DE NICOYA
Tierras bajas y laderas con
topografía plano-ondulada a irregular, entre 0-700 metros de elevación. Su
condición geológica de península relativamente estrecha bordeada por el
océano y con un gradiente altitudinal relativamente amplio provoca la
existencia de una vegetación de condiciones húmedas, especialmente hacia el
flanco occidental.
23- CIMAS DE LA PENÍNSULA DE NICOYA
Tierras elevadas o cimas de la península, arriba de
los 700 metros de altitud, con topografía plano ondulada o irregular; la
cima alberga una vegetación cuya fisonomía y composición está determinada
en mayor grado por factores climáticos como niebla y viento, dándole
características de bosque nuboso.
24- LLANURAS DE PARRITA
Tierras o llanuras con topografía plana del litoral
Pacífico, mayormente de formación aluvional, de 0-40 m, con frecuencia
inundadas o afectadas por el movimiento de las mareas. La mayor parte del área
alberga una vegetación de tipo palustrino o de ambientes estuarinos.
25- ESTRIBACIONES OCCIDENTALES DE LA CORDILLERA DE TALAMANCA
Tierras de laderas bajas, con topografía
plano-ondulada a ondulada, entre 40 y 700 metros de altitud. Dada su proximidad
con la costa alberga una vegetación con características húmedas, donde un
porcentaje de las especies, en especial las arbóreas, son caducifolias. Esta
región, por su posición central en el litoral Pacífico, representa un punto
donde se conjugan elementos florísticos de la vegetación caducifolia del
Pacífico noroeste y vegetación de climas más húmedos del Pacífico
suroeste.
26- FILA CHONTA
Tierras de elevaciones medias, entre 600-1700 metros
de elevación, de topografía quebrada, básicamente conformada por
estribaciones de la cordillera de Talamanca. Presenta una combinación
climática influenciada por el clima caliente costero y de neblina proveniente
de la cordillera de Talamanca; probablemente esta característica climática
hace que elementos florísticos montanos ocurran a elevaciones relativamente
bajas y, a la vez, elementos florísticos de bosques muy húmedos de
elevaciones bajas ocurran a elevaciones relativamente altas. Dada la cercanía
de esta fila con la costa, la cual corre paralela a la fila, y la
característica climática antes mencionada, se genera una flora muy particular
que la convierte en una unidad distinta.
27- VALLE DEL GENERAL
Tierras con topografía plano-ondulada, conformada
principalmente por la cuenca del río Grande de Térraba, con elevaciones de
entre 300 a 1000 metros. La sombra orográfica, causada por la cordillera de
Talamanca al noreste y la fila costeña al sur, encierra este valle provocando
un clima más seco, lo que permite la formación de una vegetación
semi-caducifolia, de sabanas arboladas y parches de bosques muy húmedos, con
una composición única y con varios elementos florísticos restringidos a esa
unidad.
28- VALLE DEL COTO BRUS
Tierras de elevaciones medias desde 400 a 1000 metros,
conformado principalmente por las cuencas de los ríos Coto Brus y Cotón.
Delimitado por la cordillera de Talamanca al norte y la Fila Costeña sureña
al sur. Florística y geomorfológicamente, es una extensión del Valle de
General, pero con un clima menos estacional y una combinación de especies de
plantas de distribución sureña y más de elevaciones medias (800-1000 m),
así como algunos elementos endémicos importantes.
29- CIMAS DE LA PENÍNSULA DE OSA
Tierras elevadas, de topografía quebrada, comprende
las cimas de la península, arriba de los 500 m hasta los 745 m. Estas cimas
presentan una condición climatológica especial, principalmente de niebla, que
permite la formación de bosques nubosos a baja elevación; contienen un
número considerable de elementos montanos que se entremezclan con los
elementos propios de la zona núcleo, lo que crea una composición única
dentro de esta unidad.
30- LADERAS DE OSA Y FILAS COSTEÑA, CRUCES Y CAL
Tierras de laderas, con topografía ondulada a
quebrada, con elevaciones de 40 a 500 metros. Incluye la vegetación al
interior de la península, punta Burica y las filas Costeña sur, Cruces y Cal.
Esta unidad está definida por el patrón de vegetación núcleo al interior de
la península, cuyos elementos han tomado aparentemente tres rutas de
distribución, norte hacia las filas citadas, latitudinalmente en sentido
noroeste a través de la costa y latitudinalmente en sentido
sur y suroeste. La incorporación de las filas indicadas exige una mayor
evaluación.
31- LLANURAS DE LA PENÍNSULA DE OSA
Tierras bajas con topografía plana a plano-ondulada,
de 0-40 m, mayormente de formación aluvional, permanente o temporalmente
inundadas; vegetación lacustre, palustre o con una estructura y composición
a menudo dominada por unas pocas especies, en especial en el estrato arbóreo.
Las dos unidades fitogeográficas pertenecen a la Isla del Coco, la primera de topografía muy quebrada y presente prácticamente en toda la isla, con bosque siempreverde tropical. La segunda en elevaciones de más de 500 metros, como la cima del Cerro Iglesias, en condición de bosque nuboso.